En la década de los cincuentas, el músico Dámaso Perez Prado lanzó al mundo una de las grandes incógnitas de la historia, que durante muchos años se mantuvo sin respuesta. Sin embargo, tras de décadas de estudio, un reconocido arqueólogo e historiador logró encontrar la verdad sobre el misterio: ¿Qué le pasa a Lupita?
Indiano Yons, quien se dedicó a fondo a estudiar el caso, nos presentó sus conclusiones, que nos han dejado boquiabiertos: «Al parecer, Lupita era hija de un matrimonio formado por un mexicano de tendencias derechistas y una cubana que, aunque radicaba en México, seguía siendo fiel a Castro. Obviamente, cuando triunfo la Revolución Cubana, el padre no quiso que su hija tuviera nada que ver con Cuba, incluso aunque el autor del mambo hace años que vivía aquí. Su madre, por otro lado, la instaba a bailar a escondidas, no por el mambo en sí, sino para formarle un espíritu rebelde. En realidad, estamos frente a una metáfora de la época, en donde una generación se enfrentaba a una rebeldía naciente, y al mismo tiempo a la disciplina de la tradición”.
El investigador está intentando ahora encontrar a Guadalupe, que él asegura sigue viva, pero no nos ha dado adelantos.