México está involucrado en un conflicto internacional, y esta vez no es con Estados Unidos por lo del muro, sino con Europa, debido a que los productores de queso del viejo continente no quieren que los queseros mexicanos utilicen los nombres de sus quesos debido a la denominación de origen.
El de especial controversia es el manchego, que España reclama como suyo, a pesar de que el manchego mexicano es muy diferente (leche de vaca en vez de leche de oveja) y que le pusieron así los mismos conquistadores españoles hace 500 años.
Ahora, además de los quesos, surgió otro reclamo, pues la ciudad de Hamburgo, Alemania, exige que México deje de llamarle “hamburguesas” a las hamburguesas.
Hans Lebensmittelverkäufer, representante en México de la ciudad estado de Hamburgo viajó a nuestro país para entregar una carta a la Subsecretaría de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía en la que exige se pague una compensación monetaria por cada hamburguesa producida, cosa que México no está dispuesto a hacer.
“Eso sería equivalente a pagarle entonces a Barbados por la barbacoa, eso es absurdo”, señaló Juan Carlos Baker, Subsecretario de Comercio Exterior.
Por su parte, Ildefonso Guajardo, titular de la Secretaría de Economía, declaró: “¡Que nos demanden! ¡A ver de a cómo nos toca!”, y de puro gusto se fueron a un puesto de esos del carrito naranja a pedir cuatro hamburguesas con queso manchego que no es de La Mancha, unas papas a la francesa que no son de Francia, y de postre pasaron por un flan napolitano que tampoco viene de Nápoles.